"Espolón Lady Fly" y "Sietune" (Riglos)

Enero 2015

Riglos nunca acaba de sorprenderte. ¿Caliza en Riglos? Pues si… Y además al lado de uno de los Mallos Grandes, el  Firé. Una pequeña pared de caliza orientada al oeste y con unas vistas espectaculares al río Gallego y a Peña Rueba/Ruaba. Lugar tranquilo y apacible que hemos denominado "El Bulevar de los Sueños Rotos". Hemos abierto dos rutas cortas, de corte deportivo, pero muy resultonas: "Espolón Lady Fly" y "Sietune". Debido a su orientación, da sombra por la mañana, salvo en el canto del Espolón. El acceso es cómodo, se sube por la GR que va entre el Pisón y el Firé; después de unos 20 minutos  y en una bifurcación del camino a la izda, salir a media ladera (hay un hito señalizando). Unirse a la pedrera visible desde abajo y continuar como si fuéramos al collado del Firé a escalar las 5 Puntas. Una vez en el collado seguir unos hitos y un sendero a la derecha que desciende ligeramente a la vertiente contraria. La primera vía que nos encontramos es el “Espolón Lady Fly", que está casi al inicio del descenso. Unos cien metros más adelante está la vía “Sietune”.

                               

ESPOLÓN LADY FLY (dedicada a nuestra amiga Judith)

Consta de dos largos:

• El primero sorprende por ser atlético, aunque no muy difícil; si bien no se debe bajar la guardia. Dificultad V+ y 35 mt. Salir a una repisa herbosa y andar unos metros para montar la reunión bajo el espolón.
• El segundo largo ya tiene más miga, muro vertical y plaquero en el que habrá que moverse a un lado y otro. Tramo muy bonito y técnico. Salida por unos metros finales en diedro algo rotillo; hemos limpiado bastante, pero puede quedar alguna piedra suelta. Dificultad 6b y 25 mt. (Dificultad obligada, con artimañas, V+)

Se ha dejado equipado con argollas para poder rapelar. El primer rapel se recomienda hacerlo solo con una cuerda, pues no llega a 30 metros y así evitamos que la cuerda sobrante se enganche en la vegetación. También se puede bajar andando.

SIETUNE (dedicada a nuestra amiga ´Siete´)

La vía se encuentra unos 100 metros más abajo de la anterior, y en la vertical de unos desplomes y una fisura que forma parte del largo 2. Consta de 3 largos.

• El L1 supera algunos cortos desplomes con pasos atléticos y luego discurre por un diedro hasta una buena repisa. Dificultad V+/6a y 30 metros.
• El L2 transcurre por una espectacular fisura. Al principio, muro para alcanzar la fisura, luego desplome en bavaresa con salida atlética de buen canto (6b), y finalmente escalada más fácil pero muy bonita (IV+/V) hasta alcanzar la reunión.
• El L3 es una placa y muro de aspecto más benévolo de lo que realmente resulta, pues la escalada es técnica y exigente (6b+). Aquí llegamos a una reunión con anillas (opcional), de la que se aconseja rapelar si no deseamos escalar el tramo final (IV) 

Si proseguimos hasta la cima, encontraremos otra reunión pero sin anillas. Si rapelamos desde las anillas, se puede descender en dos rapeles: uno corto de unos 20 metros y otro hasta el suelo de casi 60 metros, muy espectacular.

La dificultad obligada de la vía puede ser V+/6a.

Si queremos bajar andando (que es lo más rápido y cómodo si no vamos a hacer otra vía), seguir unos hitos y trazas de senda, con tendencia izquierda, hasta el Collado Norte.

Si por el contrario hemos rapelado, regresar a Riglos por el camino de subida. Una vez que se empieza a bajar desde el collado, tenemos la opción de seguir por la pedrera directo, en lugar de cruzarnos por la senda que va horizontal por entre la vegetación hasta la GR. En la pedrera hay varias trazas de bajada; la más cómoda es la que va más a la izquierda (mirando según se baja) y que se alcanza tras cruzar una zona con arbustos señalizada.