Nueva vía abierta este otoño 2021, que aprovecha los tres primeros largos de la Final Fantasy, para luego continuar entre las vías "Diedro Royo" (y luego Directa al Mallo de la Mora) y "Tres y no Res". Si solo quisiéramos escalar la parte nueva (5 largos), se puede acceder subiendo por la Ferrata hasta después de los tres primeros tramos equipados con sirga, y a la altura de un hito bastante grande descender por un espolón hasta llegar al barranco que empieza en la R3 de la Final Fantasy. Esta opción podría ser interesante si los largos de abajo estuvieran mojados, o hiciera mucho frío por estar en sombra el inicio.
La Spectra se cruza dos veces con la vía "Tres y no Res", a la altura de los largos L2 y L3 de ésta. En esos puntos no se han añadido nuevos seguros. En el primer cruce, parece más lógico seguir unos metros por donde va nuestra vía (el fondo de un diedro), pero los aperturistas del citado itinerario lo descartaron porque era necesario sanearlo de vegetación y bloques de piedra.
Desde la R3 de la Final Fantasy seguir "ensemble"unos 40 metros por el barranco y luego cruzarse a la pared de la izquierda. La R0 tiene un parabol con un cordino y se encuentra unos 4 metros a la derecha del inicio del Diedro Royo (que tiene un cintajo blanco ya muy descolorido).
L1: Escala la fisura evidente, que desploma ligeramente en su tramo central. Al inicio la roca parece sucia de musgo, pero la adherencia no es mala. La parte más difícil es la central (6b), siendo el inicio y el final más fáciles. 25 metros.
L2: Largo un poco sinuoso, que va buscando los tramos más fáciles. 25 metros. 6a en la llegada a la R2, pero el resto V/V+.
L3: Se empieza por un diedro, se cruza a la derecha y luego ascendemos por otro pequeño diedro que nos deposita debajo de un extraplomo. Superarlo de derecha a izquierda (6b+) y llegar a la reunión. 30 metros.
L4: salir a la izquierda, por un terreno fácil, para contornear un espolón. El segundo tramo es un muro vertical (6a+), que una vez superado nos lleva a la R4.
L5: Sucesión de pequeños resaltes que nos lleva hasta la cima. 25 metros. V grado.
La roca es, en general, muy buena, aunque en algún punto todavía podamos encontrarnos algo de tierra procedente del saneamiento. La vía está completamente equipada con paraboles M10. Llevar unas 18 cintas, varias largas para disminuir el rozamiento. Las reuniones están equipadas para rapelar, si fuera necesario. El grado obligado, aunque a veces depende de la pericia del escalador, yo lo pondría en 6a.
El descenso es el habitual del Mallo de la Mora: destrepar por las cuerdas fijas y llegar hasta la Ferrata.